Antes de emprender deberías responder a 3 preguntas.
Y es que emprender tu propio negocio no es fácil, pero tiene beneficios que tal vez compensen el sacrificio.
Aquí tienes las 3 preguntas que a día de hoy le haría a la Carmen de hace 4 años, que decidió emprender:
- ¿Cuál es tu por qué? ¿Cuál es tu razón poderosa por la que quieres cambiar un trabajo estable por incertidumbre?
- ¿Esa razón poderosa compensaría lo que dejas atrás?
- ¿Estás preparada para trabajar más horas que nunca, e invertir esfuerzo y dinero por ese objetivo que quieres conseguir?
Mis respuestas en ese momento hubieran sido:
- Porque quiero sentir que aporto algo al mundo, que mi vida tiene un sentido más allá de ver los años pasar en una oficina haciendo un trabajo que no me aporta nada, sólo un sueldo a final de mes ? Quiero disfrutar de lo que haga y sentir que ayudo realmente a otras personas ❤️ Quiero una vida feliz sin ansiedad y depresión.
- Si, me haría sentir realizada y en algún momento podría vivir de lo que haga, e incluso vivir bien, sin tener el techo que tengo en mi empresa. Además, es que no quiero seguir haciendo lo que hago, no me imagino seguir trabajando de lo mismo en esta o en cualquier otra empresa… Necesito hacer algo diferente.
- Si, yo haré lo que haga falta para conseguir mi objetivo, siempre que no entre en conflicto con mis valores. Soy una persona entregada y constante. Yo puedo.
Si tus respuestas te guían a emprender tu propio negocio, ADELANTE! y no hagas caso de lo que te digan los demás…
3 lecciones que he aprendido con mi negocio
1.- Tienes mucho que aportar. Eres única y muchas personas querrán tus servicios porque tienes algo especial que otros no tienen. No te sientas menos que nadie. Valora tu trabajo. Lo haces muy bien.
2.- Ten varias líneas de negocio. No pongas todos los huevos en la misma cesta. Crea diferentes fuentes de ingresos (sin volverte loca, pues quien mucho abarca poco aprieta).
?? Ten al menos 2 o 3 servicios (por ejemplo, una formación, un servicio puntual y un servicio recurrente).
Así, si una se cae por cualquier razón, tendrás las otras para seguir adelante hasta que puedas crear una nueva línea de ingresos.
3.- Delega siempre que puedas y dedica el tiempo a lo que realmente se te da bien y te encanta. Te llevará tiempo y dinero dar con las personas adecuadas, así que empieza lo antes posible. No tengas miedo a delegar.
Y ahora cuéntame tu
¿Me compartes algún aprendizaje que hayas tenido durante el tiempo que llevas emprendiendo por cuenta propia?
¿Qué responderías a las 3 preguntas que te hice al principio de la entrada?
¿Alguien te ha dicho en algún momento que estabas loca por dejar tu trabajo y emprender?
Me encantará leerte.