Emprender es sinónimo de resiliencia, de aprender a superar las adversidades y seguir adelante para conseguir tus sueños.
Hace un tiempo encontré este relato del burro y hoy me apetecía compartirla contigo junto a una pequeña reflexión que te dejaré al final de la entrada.
Un día el burro de un campesino cayó en un pozo. El animal lloró fuertemente por horas, mientras el campesino trataba de buscar algo que hacer.
Finalmente, el campesino decidió que el burro ya estaba viejo y el pozo ya estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas; que realmente no valía la pena sacar al burro del pozo…
Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarle. Cada uno agarró una pala y empezaron a tirarle tierra al pozo. El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y lloró horriblemente.
Luego, para sorpresa de todos, se aquietó después de unas cuantas paladas de tierra.
El campesino finalmente miró al fondo del pozo y se sorprendió de lo que vio… con cada palada de tierra, el burro estaba haciendo algo increíble: Se sacudía la tierra y daba un paso encima de la tierra.
Muy pronto todo el mundo vio sorprendido cómo el burro llegó hasta la boca del pozo, pasó por encima del borde y salió trotando…
La vida va a tirarte tierra, todo tipo de tierra… el truco para salir del pozo es sacudírsela y usarla para dar un paso hacia arriba.
Cada uno de nuestros problemas es un escalón hacia arriba… Podemos salir de los más profundos huecos si no nos damos por vencidos…
¡¡¡Usa la tierra que te echan para salir adelante!!!
Recuerda las 5 reglas para ser feliz:
1️⃣ Libera tu corazón del odio.
2️⃣ Libera tu mente de las preocupaciones.
3️⃣ Simplifica tu vida.
4️⃣ Da más y espera menos.
5️⃣ Ama más y… sacúdete la tierra, porque en esta vida hay que ser solución, no problema.
Anónimo
La resiliencia y el desarrollo personal como compañeras de emprendimiento
Siempre lo digo, emprender no es fácil, pero creo que a nivel personal a mi me ha traído muchos beneficios.
He aprendido de resiliencia, de desarrollo personal, de asertividad, de cómo manejar ciertas situaciones que antes me bloqueaban muchísimo… No soy la misma persona de hace 3 años.
Emprender me ha enseñado que debo priorizar. Que antes que nada está mi tranquilidad y paz mental, y que si para ello debo decir no, pues es lo que hay. Tanto a personas como proposiciones y proyectos que me descentren de mi objetivo.
Y justo esto es lo que intento trasmitir a mis seguidoras y clientas. Que dejen el ruido atrás y pongan foco en lo realmente importante en este momento. Y si el objetivo es grande, a desgranarlo y priorizar las tareas para que sea más sencillo conseguir el objetivo final. Y otra cosa muy importante es simplificar. Cuanto más sencillas sean las estrategias y las herramientas a utilizar, mucho mejor.
Y ahora cuéntame tu
¿Qué te ha parecido esta historia? ¿Te sientes identificada? ¿Eres de las que se sacude la tierra y tira para adelante? ¿Qué aprendizajes te ha dado el emprendimiento?
Déjame un comentario y comparte la publicación si crees que puede ayudar a otras personas.
Me encantará leerte.